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Ricardo Moreira / Getty Images
Seis futbolistas del Brasileirao (primera división del fútbol brasileño) y uno perteneciente a un club de segunda división se encuentran dentro de los 16 señalados que la justicia de Brasil buscará imputar por el posible amaño de partidos en apuestas deportivas.
Según un reporte oficial de la fiscalía brasileña, los siete jugadores serían responsables de participar en el arreglo de al menos 13 encuentros de fútbol, de los cuales ocho se disputaron en el Brasileirao 2022 y uno en la división de plata.
Las otras nueve personas procesadas por la Justicia son los presuntos miembros de la red irregular de apuestas.
Según la investigación, los futbolistas se comprometían “a cometer penaltis” y “faltas” para recibir tarjetas amarillas y rojas con el objetivo de favorecer a una “organización criminal” dedicada a las apuestas deportivas.
La banda se encargaba de reclutar “futbolistas profesionales” para recibir entre los $10,000 y $20,000 dólares por partido con el fin de garantizarse determinadas situaciones en los partidos y “asegurarse así el éxito de elevadas apuestas deportivas” en plataformas como “Bet365” y “Betano”, indicó el informe del Ministerio Público.
Los jugadores que se sentarán en el banquillo de los acusados son: Eduardo Bauermann (Santos), Igor Cariús (Sport), Victor Ramos (Chapecoense), Paulo Miranda (Náutico), Fernando Neto (Sao Bernardo), Matheus Gomes (Sergipe) y Gabriel Tota (Ypiranga).
De ser encontrados culpables, los acusados se enfrentan a sanciones que van desde multas económicas por más de $400,000 dólares por daños y perjuicios, hasta años en prisión por cargos de estafa, asociación para delinquir, entre otros.
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