Con sus misiones Artemis, la NASA quiere abrir una nueva era de misiones lunares en la que no solo enviemos astronautas a la Luna, sino que también establezcamos una base de operaciones ahí, un puesto de avanzada extraterrestre, el primero en un cuerpo fuera de Tierra.
Para hacer eso, la NASA primero necesita comenzar a construir cosas, pero construir en la Luna es muy diferente a hacerlo en la Tierra.
En línea con sus otros proyectos recientes, la NASA no quiere hacer todo por sí misma, por lo que se está asociando cada vez más con empresas comerciales que pueden ayudar a la agencia y permitirle llevar a cabo los proyectos de manera eficiente.
“Para explorar otros mundos, necesitamos nuevas tecnologías innovadoras adaptadas a esos entornos y nuestras necesidades de exploración”, dijo Niki Werkheiser, director de maduración tecnológica en la Dirección de Misiones de Tecnología Espacial (STMD) de la NASA. “Impulsar este desarrollo con nuestros socios comerciales creará las capacidades que necesitamos para futuras misiones”.
Astroport Space Technologies, una empresa derivada de la Universidad de Australia Meridional, es una de esas empresas. La empresa fue fundada en 2020 y su actividad principal es el uso de suelo lunar (regolito) para construcciones.
Su tecnología de solidificación de regolito pendiente de patente utiliza la impresión 3D para construir cosas. En 2021, la NASA otorgó a la empresa una subvención para desarrollar una forma de construir plataformas de aterrizaje en la Luna. Ahora, la NASA quiere aún más.
Se han asociado con ICON, otra empresa innovadora que tiene como objetivo apoyar la exploración planificada de la Luna. La tecnología de ICON utiliza materiales de la Luna, mezclándolos con varios compuestos para hacerlos más resistentes y confiables.
Por ejemplo, al mezclar regolito con titanio, obtienen una mezcla liviana, duradera y perfecta para la impresión en 3D. También imprimieron en 3D un hábitat marciano simulado de 1,700 pies cuadrados.
Ahora, ICON trabajará con muestras de regolito lunar traídas de las misiones Apolo en un simulador de gravedad para ver cómo se comporta el material en la gravedad lunar.
Luego, la información se utilizará para descubrir las mejores formas de construir infraestructura como plataformas y carreteras, estableciendo la infraestructura crítica para una base lunar y, potencialmente, para una habitación lunar a largo plazo.
La compañía es conocida por construir la primera casa impresa en 3D habitable en Estados Unidos, pero hacer cosas similares en la luna será mucho más desafiante.
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