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La Organización de los Estados Americanos (OEA) pagará $120,000 dólares a una firma de abogados para que investigue al secretario general del organismo, Luis Almagro, por haber mantenido una relación íntima con una empleada.
El bufete Miller & Chevalier, con sede en Washington D.C., fue la empresa seleccionada de entre las seis propuestas para llevar a cabo la investigación, según confirmaron a EFE dos fuentes con conocimiento del asunto.
La empresa debe entregar un informe con sus hallazgos en un periodo de tres meses, es decir, que para marzo de este año el Consejo Permanente recibirá dicho reporte y deberá decidir qué acciones tomar.
El secretario general tuvo durante tres años una relación sentimental con una empleada de la OEA, según confirmó el propio Almagro frente al pleno del organismo.
Aunque en papel la empleada no tuviera el cargo de asesora directa de Almagro, fuentes consultadas por EFE aseguraron que actuaba como tal y documentos internos muestran que tuvo varios ascensos.
La OEA asegura que dichos ascensos fueron de acuerdo al reglamento del organismo y que no hubo intervención alguna por parte del secretario general.
“Todas las acciones administrativas respecto a esta funcionaria fueron de acuerdo a regulación y fueron administrados para ella igual que para todo el personal. Y en ninguno de los casos tuvo intervención alguna el Secretario General, pues como ya fue reiterado, nunca fue su supervisor”, dijo a EFE un portavoz de la organización.
El inspector general de la OEA, Hugo Eduardo Ascensio, fue quien recomendó contratar a una firma externa para llevar a cabo las pesquisas después de haber sido informado del romance por parte de una fuente anónima.
La investigación estará centrada en si, en el marco de la relación sentimental, Almagro infringió varios reglamentos de la OEA. En concreto, las normativas en relación a las funciones de supervisión, los aumentos salariales e intimidación.
También será investigado respecto a otra denuncia del informante anónimo, que señala que una empleada doméstica que trabajaba en la residencia oficial de la OEA fue agredida física y verbalmente por la exesposa de Almagro, Marianne Birkholtz.
En octubre, durante la Asamblea General de la OEA en Lima, Almagro aseguró que no había contravenido las normas del organismo y afirmó que nunca fue “supervisor de ninguna persona” con la “que tuviera una relación”.
Almagro, que fue canciller de Uruguay entre 2010 y 2015, está al frente de la OEA desde 2015 y renovó para un segundo mandato de otros cinco años en marzo de 2020.
La polémica en torno a su relación con otra empleada de la OEA se desató poco después de que la asamblea de Gobernadores del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) decidiera en septiembre por mayoría destituir a su presidente, Mauricio Claver-Carone, por tener una relación amorosa con una subordinada, algo que él niega.