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Fernando Martínez / Impremedia
El actual primer comisionado del Departamento de Policía de la Ciudad de Nueva York (NYPD) Edward Cabán, el hispano que ha escalado la posición de liderazgo más alta en la historia del cuerpo policial y además ocupa el cargo más importante alcanzado por un ‘neoyorican’ en esa institución, inició su carrera como oficial en 1991, patrullando las calles del sur de El Bronx.
Ahora, en su despacho en el comando central del cuerpo policial más grande del país, en el One Police Plaza, en el Bajo Manhattan, desarrolla políticas para un servicio más eficiente de los oficiales, administra el personal y supervisa todo el sistema disciplinario.
“Creo que como hispano que me crié en El Bronx, de padres puertorriqueños, con 31 años de servicio en esta institución, soy una expresión muy clara de que para NYPD uno de los valores más importantes es la diversidad. Y esa es la clave para entender y proteger a nuestras comunidades. Y lograr nuestro objetivo de seguridad pública”, destacó Cabán en su conversación con El Diario.
Este oficial veterano constantemente recuerda el legado de su padre, Juan Cabán, quien se desempeñó como Detective de la Policía de Tránsito de la Ciudad de Nueva York y fue Presidente de la Sociedad Hispana de la Policía de Tránsito.
“Escoger la carrera policial no fue difícil, porque crecí teniendo con mi padre la inspiración por el amor al servicio a esta ciudad. El luchó por los oficiales hispanos, para que tuvieran promociones. Ahora, luego de años de esfuerzo, nuestro rol es diferente. Todos los días pensamos en cómo representar, proteger y garantizar seguridad a por lo menos 100 grupos étnicos que conviven en la Gran Manzana”, subrayó.
La cantidad de uniformados de ascendencia hispana, actualmente alcanza la cifra de 14,000 oficiales. Esto significa que casi se ha cuadriplicado esta presencia en los últimos años en esta institución policial.
“Me siento muy orgulloso de mis orígenes, soy de la tercera generación de una familia de Ponce. Es un honor y un privilegio para mí esta posición. Pero siempre quiero dejar claro que es muy relevante, que en cada mesa, en donde se discutan grandes decisiones, haya voces y representaciones de la diversidad cultural que define a la ciudad de Nueva York”.
NYC es muy distinta
Como segundo al mando del NYPD, Cabán observa que a pesar de las circunstancias complicadas y los grandes desafíos que surgen en la ciudad cada día, la Gran Manzana está en un momento “muy diferente” a la pesadilla que implicó la violencia criminal en los años 80 y principios de los 90.
“La ciudad de Nueva York llegó a tener más de dos mil homicidios en un año. Alrededor de cinco mil tiroteos. Íbamos a balaceras todos los días. Fue un momento difícil. Y ahora, hemos recorrido un largo camino. No se compara. Todavía tenemos mucho trabajo por hacer. Pero sin dudas, estamos en un mejor lugar”, destaca.
Y ese mejor “lugar”, también pasa por una mejor circunstancia para los beneficios contractuales y salariales de los uniformados.
Como anunció recientemente el mismo alcalde Eric Adams, 23,000 miembros de NYPD pueden esperar sus primeros aumentos en seis años, gracias a un contrato tentativo de ocho años con la Asociación Benevolente de la Policía (PBA).
Este acuerdo entrará en vigor retroactivamente a partir del 1 de agosto de 2017, ofreciendo incrementos anuales desde el 2.25% hasta el 4%. Esto significa que el pago máximo a los funcionarios ahora será de $ 131,500, con un pago inicial de $ 55,000.
También se anunciaron horarios más flexibles, lo que según la PBA significará semanas laborales de cuatro días y horarios menos exigentes para algunos oficiales.
“Es momento de amplificar una idea en nuestros jóvenes: Que vean a nuestra policía como un espacio en el cual pueden hacer una carrera ejemplar. No solo es un tema de mejores salarios. Es también que seamos capaces de transmitir la filosofía que en nuestras filas van a servir a la comunidad. Ahora hay una visión de respaldo absoluto de la Ciudad y el Alcalde para con la policía. Y eso se traducirá siempre en más seguridad pública”, acotó Cabán.
El momento de la innovación
En un momento en el cual los altos jerarcas de NYPD han anunciado la incorporación de más tecnología de punta basada en la inteligencia artificial, nuevas patrullas eléctricas con cámara de 360 grados y nuevos mecanismos para que las comunidades estén más cerca de los oficiales desde sus teléfonos, también existen portavoces de organizaciones comunitarias que insisten y temen en que esta inversión será para “sobrevigilar” a los neoyorquinos.
De hecho, hace un par de semanas, con el derrumbe por fallas estructurales de un piso de un estacionamiento en el Bajo Manhattan, actuó entre los escombros Digidog, el perro robótico de NYPD, que es una herramienta futurista de cuatro patas que puede ir a lugares que eran demasiado peligrosos para enviar oficiales.
“Estos son ejemplos muy claros, de que estamos viviendo una era de innovación en todas las áreas de la institución. NYPD siempre ha sido una institución de vanguardia, ejemplo para todo el mundo. No tengo dudas, que la tecnología siempre será empleada para dar todas las capas de seguridad posible a los neoyorquinos. Pero también para dar más efectividad a nuestros oficiales”, destacó el oficial.
Perfil de un policía:
- El primer comisionado adjunto de NYPD tiene una Licenciatura en Ciencias en Justicia Penal de la Universidad de St. John. Él y su esposa Leidy tienen un hijo, Edward, y una hija, Ava.
- Comenzó su carrera como oficial de policía en 1991, patrullando las calles del sur del Bronx.
- Ascendió a sargento en 1994. Después de varias asignaciones de supervisión en el Bronx y Alto Manhattan, fue ascendido a teniente en 1999.
- Escaló las filas ejecutivas de la Uniformada en 2005 con un ascenso a Capitán.
- Fue ascendido a subinspector en 2008. Más recientemente, se desempeñó como ayudante de Patrol Borough Brooklyn North, donde supervisó muchos programas y fue ascendido a Inspector en 2015.