El pollo frito es una popular comida reconfortante de comida rápida que puedes preparar en casa y ahorrar dinero. La harina de arroz puede ayudar a preparar un pollo frito perfecto, crujiente, más ligero y con menos grasa.
Para que un pollo frito este perfecto no solo debe tener un excelente sabor y estar bien condimentado, sino también tener una excelente textura, carne jugosa y cubierta crujiente, un color dorado uniforme, no estar demasiado empanado ni ser súper grasoso.
Con la harina para todo puede obtenerse un pollo frito con buena textura cuando se consume recién salido, pero después de un rato, la salsa y el empanado suelen terminar en un pollo empapado.
Elegir la harina de arroz sobre la harina de todo uso puede ayudarte a lograr buen pollo frito. Algunas recetas asiáticas de pollo frito contienen harina de arroz o almidón de maíz.
La harina de arroz es un excelente ingrediente para el empanado. Bon Appetit explica que la harina de arroz no absorbe tanto aceite como la harina común durante el proceso de fritura, por lo que el resultado es una textura final menos grasosa.
Combinar un poco de maicena con la harina de arroz puede darte los mejores resultados. “La maicena funciona para mantener las cosas livianas y aireadas”, señala Bon Appetit.
La maicena cubre cada rincón del pollo sin volverse espesa o pegajosa. La maicena también absorbe parte de la humedad del pollo marinado, lo que es de gran ayuda para unos trozos de pollo crujientes.
Antes de freír el pollo, asegúrate de que la temperatura del aceite está lo suficientemente caliente.
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