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Daniel Penny (24), infante de marina sospechoso de haber causado la muerte por estrangulamiento del pasajero Jordan Neely (30) en el Metro de Nueva York porque al parecer habría estado amenazando a otras personas, se entregó esta mañana a la policía.
La Oficina del Fiscal del Distrito de Manhattan acusó a Penny de homicidio involuntario en segundo grado por la muerte de Neely. Quedó libre tras pagar una fianza de $100,000 dólares y su próxima aparición en la corte quedó programada para el 17 de julio. Se le ordenó entregar su pasaporte y ni siquiera podrá salir de los límites del estado Nueva York.
Penny y su abogado Thomas Kenniff se presentaron en la comisaría 5 en el Bajo Manhattan. El acusado no habló con los reporteros, comentó CBS News. “Poco después de las 8 a.m. Daniel Penny se entregó en el 5to Recinto a pedido de la oficina del fiscal de distrito del condado Nueva York. Lo hizo voluntariamente y con el tipo de dignidad e integridad que es característico de su historia de servicio a esta nación agradecida. El caso ahora irá a los tribunales”, dijo Kenniff.
El polémico caso ha cobrado atención nacional. El dramático incidente fatal sucedió la tarde del lunes 1 de mayo en un tren de la línea F en Manhattan y fue captado en video. Penny había sido detenido ese mismo día y luego fue liberado sin ser acusado. Su nombre sólo fue revelado días después.
Al parecer Neely estuvo actuando de manera errática y amenazando a los pasajeros cuando fue sometido por el U.S. Marine, líder del escuadrón de infantería de West Islip (Long Island), a quien algunos han llamado un “héroe”. La víctima, que al parecer padecía problemas mentales y fungía como artista de calle imitando a Michael Jackson, murió por compresión del cuello en un estrangulamiento, determinó el miércoles 3 de mayo el médico forense de la ciudad.
En los días posteriores hubo varias protestas y detenciones en calles de la ciudad y dentro de la estación Broadway-Lafayette, donde ocurrió el estrangulamiento, en contra de la liberación de Penny. Muchos de los manifestantes se identificaron como del movimiento “Black Lives Matter” (BLM).
En respuesta el alcalde Eric Adams se ha concentrado en recordar la crisis de salud mental en NYC, que tiene como punto focal el Metro de Nueva York y que su gobierno ha intentado combatir, pero la estrategia ha sido criticada por algunos activistas.
La familia de Neely ha criticado al alcalde por no haber exigido que se presentaran cargos contra Penny. El miércoles Adams dijo que la ciudad “le había fallado” al joven ante sus problemas de salud mental.
“Durante los últimos años, Jordan (Neely) se conectó con muchas agencias de la ciudad. Tuvo varios encuentros con la justicia penal y se le brindaron servicios para ayudarlo a vivir de manera segura en la comunidad. Esos esfuerzos no fueron suficientes y debemos encontrar formas de fortalecer nuestra sistema”, dijo el alcalde.
La policía de Nueva York arrestó a Neely 42 veces en la última década y tenía un historial documentado de salud mental. Su detención más reciente había sido en noviembre de 2021 por golpear en la cara a una mujer desconocida de 67 años. El 23 de febrero se emitió una orden de arresto por cargos de agresión grave.
Siendo adolescente Neely cayó en una profunda depresión después de que su padrastro asesinara brutalmente a su madre en 2007 y no recibió el tratamiento adecuado para su enfermedad mental, dijeron amigos y familiares al New York Post.
Desde que asumió el cargo en enero de 2022 el alcalde Adams, ex NYPD, anunció varias veces que se duplicaría el número de agentes de la policía de Nueva York en el sistema subterráneo en un reforzado plan de seguridad para hacer frente a la violencia en el caótico Metro de NYC. Pero hasta ahora el crimen y el caos han seguido.
Al mismo tiempo MTA enfrenta pérdidas millonarias por la cada vez mayor cifra de usuarios que acceden sin pagar al Metro y buses. En enero se estimó que unos 3,400 desamparados estaban viviendo en vagones y estaciones del subterráneo.
Además las colisiones de trenes con personas en las plataformas y rieles han experimentado un aumento alarmante de 25% en los últimos cuatro años (2018 a 2022).