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Vaya noche llena de emoción la que se vivió en la entrega 23 de los Latin Grammy.
La Academia Latina de la Grabación ya ha concedido este jueves los premios, en Las Vegas, y los nervios se apoderaron de las estrellas y sus fans por escuchar quiénes se llevarían a casa el gramófono dorado.
Este año la cantante brasileña Anitta fue una de las anfitrionas de la ceremonia junto con la mexicana Thalía, Laura Pausini y el puertorriqueño Luis Fonsi, pero también derrochó con su energía musical por todo el escenario.
Como es costumbre de Anitta, en un momento dado de su número en la gala, se acercó a las primeras sillas del auditorio para seducir al personal con el hipnótico movimiento de sus caderas.
El afortunado, en esta ocasión, fue el colombiano Sebastián Yatra, a quien logró seducir y poner nervioso por las varias risas nerviosas que dejó escapar, mientras Anitta protagonizaba un ardiente momento bailándole sensualmente.
Aunque el público y los artistas también la miraban encantados vestida con el diminuto short y un sensual top que eligió para interpretar los temas “Movimento Da Sanfoninha”, “Rave De Favela”, “Vai Malandra”, “La Mamá De La Mamá”, “Machika” y “Envolver” que, sin duda, causaron sensación.
Anitta y su flamante paso por la alfombra roja de esta edición de los Latin Grammy es otro de los tantos éxitos que ha sumado la artista brasileña este año, pues asistió a la ceremonia de premiación en calidad de nominada: su nombre figuró en la categorías Álbum del Año y en Mejor Interpretación de Reggaeton por su álbum “Envolver”.
Por otra parte, Yatra se llevó los dos premios más importantes de la noche en lo referente al mundo del pop: el de Canción Pop del Año por “Tacones Rojos” y el de Álbum Pop por su aclamado disco “Dharma”.
