Camila, una niña de 3 años, era velada en una localidad de San Luis Potosí, México, pero su familia se dio cuenta que estaba viva y la trasladó de inmediato a un hospital, pero lamentablemente murió en el camino, por lo que la Fiscalía General de Justicia del estado, abrió una carpeta de investigación.
Y es que la pequeña Camila, fue dada por muerta por un médico del Hospital Comunitario del municipio de Salinas, en el estado mexicano de San Luis Potosí, en el centro del país.
La menor presentó vómito y diarrea
De acuerdo a Mary Jane Mendoza, madre de la menor, fue el pasado 16 de agosto cuando Camila comenzó a sentirse mal, tenía vómito y diarrea, por lo que la trasladó alrededor de las 10:30 de la noche al servicio de urgencias del Hospital Comunitario.
Pero dos horas después, en el hospital le informaron que su hija había muerto, y luego de realizar los trámites administrativos, le entregaron el cuerpo de la pequeña Camila.
De acuerdo a Mary Jane, el médico que extendió el certificado de defunción puso que la causa de la muerte de la menor fue por deshidratación severa y diarrea aguda.
La mamá de Camila se dio cuenta que estaba viva la menor
La familia trasladó el cuerpo de Camila a la comunidad de La Herradura donde fue velada, pero pasaron varias horas cuando Mary Jane notó que su niña movía los ojos y respiraba.
De inmediato se lo comunicó a sus familiares, quienes no le creyeron, ya que pensaron que eran alucinaciones de ella y que el dolor de haberla perdido, la hacían ver cosas que no son.
El funeral seguía su curso entre el dolor y el llanto por la muerte inesperada y repentina de Camila.
Pero después, otros familiares se acercaron al féretro y se dieron cuenta que efectivamente Camila respiraba.
La menor abrió los ojos en su funeral
Fue hasta que Felícitas Martínez, abuela paterna de la menor abrió nuevamente el ataúd y pasó su teléfono celular sobre el rostro cuando la niña abrió los ojos, lo cual sorprendió a los presentes.
La familia llamó de inmediato a una enfermera de la comunidad quien confirmó que efectivamente Camila, tenía signos vitales, y pidió que llamaran a una ambulancia para trasladar a la menor a un hospital.
Con la esperanza de tener nuevamente a Camila, con ellos, la llevaron primero al Hospital Comunitario, donde la habían declarado muerta, pero después la remitieron al Hospital Central, ubicado en la ciudad de San Luis Potosí.
Sin embargo, la menor murió en el trayecto, por lo que las autoridades judiciales abrieron una investigación para esclarecer los hechos. }
El segundo certificado de defunción
En el segundo certificado de defunción, destaca que la muerte de Camila se debió a un edema cerebral, falla metabólica y deshidratación.
“Que ella murió de muerte cerebral. Duró bastantes horas ahí en la caja, pero ahí yo siento que es culpa del doctor que me la entregó y la dio por muerta”, declaró a la prensa local Mary Jane, madre de Camila.
Los familiares de Camila exigen justicia y acusan de negligencia al médico del Hospital Comunitario, que la dio por muerta, cuando la menor realmente estaba viva.
Familiares exigen justicia
La Fiscalía del estado abrió varias líneas de investigación, entre ellas por presunta negligencia.
“Estamos definiendo varias líneas de investigación esto también en relación al actuar de los médicos, de los servicios funerarios, de los ayuntamientos tanto de Villa de Ramos como de Salinas”, declaró a la prensa José Luis Ruiz Contreras, fiscal general del estado de San Luis Potosí.
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