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Caroline Willis / NYC Mayoral Office
Funcionarios de la Ciudad de Nueva York levantaron tres banderas de alerta: el riesgo creciente de los incendios por los cargadores de bicicletas eléctricas, las ventas sin licencias de productos derivados de la marihuana y la guillotina que puede resultar que jóvenes sigan “surfeando” en los vagones del Subway.
En la primera sesión informativa virtual sobre el estado de la seguridad pública en la Gran Manzana, realizada el viernes 24- además de exponerse algunos avances en la guerra contra la criminalidad, en paralelo, se hicieron llamados muy concretos, especialmente a padres y representantes, a que tomen previsiones para evitar situaciones que podrían terminar fácilmente en fatalidades.
“Con nuestra acción en el Subway, en donde dirigimos 1,000 efectivos policiales, la tasa de criminalidad en en este sistema se ha reducido en un 8% en comparación con los niveles prepandémicos. Es apenas una parte de los resultados que podemos mostrar en nuestro objetivo de construir una ciudad en donde la gente esté y se sienta segura”, puntualizó Keechant Sewell, comisionada del Departamento de Policía de la Ciudad de Nueva York (NYPD).
Los “surfistas” de los trenes
Pero el tema del Subway, esta vez no se dirigió a las incidencias violentas y los desamparados en el sistema de transporte, sino que se convirtió en un llamado a que las familias estén atentas a que sus hijos se mantengan alejados de la peligrosa tendencia de retos virales, en algunas redes sociales, de “surfear” en la parte superior de vagones. Un hecho que en este año ya terminó en una muerte y un arresto.
Un joven de 17 años fue arrestado por treparse en el metro de Queens el miércoles, solo dos días después de que otro adolescente muriera haciendo el mismo truco en el tren J en el puente de Williamsburg.
“Queremos decirle a nuestras comunidades que esta es una práctica extremadamente peligrosa, que lamentablemente este año, ya terminó con un jovencito fallecido”, destacó Sewell.
Los neoyorquinos lo llaman “subway surfing” y consiste en montarse en la parte superior de los carros del metro, en los tramos no subterráneos. Solo que ahora esta moda se publica de manera creciente como un gran logro en redes sociales.
¡Cuidado! Baterías mortales
El otro punto de preocupación que llama a la acción preventiva de los neoyorquinos, son los cargadores de litio de las baterías eléctricas, cuyas explosiones han causado al menos 22 incendios devastadores y una muerte en este año.
En este caso, Laura Kavanegs comisionada del Departamento de Bomberos de la Ciudad de Nueva York (FDNY) anunció que están tratando de abordar este “tema complicado”, desde varios ángulos, incluyendo regulaciones para que los cargadores que se vendan en la Gran Manzana sean 100% certificados.
“Entendemos que estas bicicletas son el instrumento de trabajo de miles de nuestros residentes. Por ello queremos reforzar nuestras campañas de educación, para que nunca carguen estos equipos en el interior de sus vivienda, cuando están durmiendo. Y nunca traten de repararlos cuando presenten fallas”, destacó la funcionaria.
Lamentablemente a principios de febrero tres niños resultaron heridos, dos de gravedad, cuando la batería de una bicicleta eléctrica en su apartamento de Manhattan se incendió, atrapándolos en las llamas. Un adulto también resultó gravemente afectado en el fuego que destruyó una unidad residencial en un quinto piso en el 165 de la Avenida Sherman en Inwood.
La batería de una ‘e-bikes’ se estaba cargando en la puerta de la residencia durante la madrugada. Se sobrecalentó y explotó, el incendio bloqueó la salida del apartamento atrapando a la familia en las llamas.
Otra alerta: ventas ilegales de cannabis
Por su parte, el alguacil de la ciudad de Nueva York, Anthony Miranda, reforzó la estrategia de combatir por todos los medios las ventas ilegales de productos derivados de la marihuana, en tiendas sin licencia, en los cinco condados, lo cual constituye una amenaza muy clara para los niños y adolescentes.
“Queremos recordar a nuestras comunidades que continuamos nuestras inspecciones y decomiso de esta mercancía ilegal, que en muchos casos viene empacada con colores atractivos para los niños”, destacó Miranda.
En muchos casos los establecimientos comerciales están ubicados cerca de escuelas e iglesias, por lo cual se exhorta a los vecinos a denunciar la presencia de estos productos.
El Grupo de Trabajo de Cumplimiento de la Oficina del Sheriff (SCTF) realizó esta semana cuatro inspecciones en los alrededores de la comisaría 73 de Brooklyn. Dos de estas acciones resultaron en arrestos por delitos graves por posesión de cannabis ilegal y posesión criminal de armas.
“Las alertas de los residentes son muy importantes para nosotros. Desde el pasado mes de noviembre hemos decomisado millones de dólares en estos productos ilegales que pueden ser muy peligrosos para nuestros niños”, concluyó.
Ya en la ciudad se han registrado un par de casos documentados de niños intoxicados tras consumir productos derivados de la marihuana en forma de gomitas, caramelos y otras formas.