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William Rio Rosado/Fuerza Aérea EE.UU / EFE
El general Mark Milley aseguró la tarde de este miércoles que desde las autoridades del Estado Mayor Conjunto no han determinado si el caza ruso interfirió con un choque intencional al dron MQ-9, causando el impacto de la aeronave no tripulada sobre el Mar Negro. Esta acción ha causado una escalada en las tensiones de Washington y Moscú a causa de la Guerra de Ucrania.
Según el jefe del Estado Mayor Conjunto todavía se mantiene una investigación sobre el incidente con el gobierno de Rusia, que hasta el momento parece tener una solución diplomática. Milley adelantó en una conferencia de prensa que sostendrá un encuentro telefónico con Moscú para tratar el caso.
Milley también confirmó que para Estados Unidos el acercamiento del caza ruso al MQ-9 fue intencional y agresivo. “El comportamiento agresivo fue intencional, también sabemos que fue muy poco profesional y muy inseguro”, dijo Milley.
“Lo que quiero decir es que si hace un llamado para reposicionarse en algún momento, no significa que la guerra esté perdida. Puede significar, y probablemente significará, que se posicionan para mantener la ventaja”, agregó Austin.
El portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov dijo más temprano que no se cierran a una solución diplomática para el incidente del Mar Negro. Incluso Anatoly Antonov, embajador de Rusia en Washington afirmó en un comunicado que su país no quiere confrontación, aunque los aviones estadounidenses no tienen nada que hacer “cerca de la frontera rusa“.
Sin embargo, El ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, admitió este miércoles que cualquier incidente con Estados Unidos conlleva riesgos muy grandes. “Cualquier incidente que provoque un enfrentamiento entre dos grandes potencias, dos potencias nucleares, las mayores del mundo, siempre conlleva riesgos muy grandes“, dijo en una entrevista en los medios locales rusos.
