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El presidente Joe Biden y la primera dama Jill Bien viajaron a Puerto Rico para anunciar mayores inversiones para el rescate de la isla tras los desastres ocasionados por el huracán Fiona.
El mandatario dijo que se destinarán $60 millones de dólares adicionales de fondos federales para apuntalar los diques, fortalecer los muros contra inundaciones y crear un nuevo sistema de advertencia de inundaciones.
“Estoy decidido a ayudar a Puerto Rico a construir más rápido que en el pasado y más fuerte, mejor preparado para el futuro”, dijo el presidente poco antes de partir de la Casa Blanca, tras señalar que la isla no había sido atendida “bien” en el pasado.
El gobernador de Puerto Rico, Pedro Pierluisi, abrió las presentaciones en el Puerto de Ponce, donde pidió al presidente Biden extender una declaración de desastre mayor por 180 días más para que la isla pueda obtener el pago al ciento por ciento de la remoción de escombros y otros trabajos de recuperación.
Pierluisi agradeció las acciones de la Administración Biden, además de asegurar que el trabajo del Gobierno federal no era “un incidente aislado”, al tiempo que pidió que los puertorriqueños fueran tratados como cualquier estadounidense.
