El editor de la BBC especializado en asuntos de la realeza, Nicholas Witchell, ha generado un intenso debate en el seno de la prensa británica por sus últimas declaraciones acerca del estado de salud de Isabel II, cuya preocupante evolución ha obligado a la soberana británica a someterse a un período de “revisión médica continuada” por parte de sus doctores de confianza.
Varios periodistas del país, como Gabriel Pogrund o Anita Singh, han recurrido a sus redes sociales para criticar abiertamente a Mitchell por especular en exceso acerca de los problemas que experimentaría la soberana. Este profesional ha sugerido que la monarca podría estar enfrentándose a un cáncer o que sufriría la gota, unas declaraciones que han sido tildadas de irrespetuosas e “intrusivas” por parte de sus colegas.
“Es verdaderamente raro. Totalmente fuera de lugar en la línea informativa de la BBC, que está siendo, por otro lado, muy respetuosa. Se nota que (Mitchel) odia al palacio de Buckingham”, ha tuiteado Singh poco después de alertar de que el periodista se estaba quejando ostensiblemente de no haber sido debidamente informado de la situación por parte de la casa real.
Para Pogrund, la actitud de este corresponsal es “surrealista” y decepcionante, ya que estaría dando prioridad al enfoque sensacionalista en el marco de una noticia de especial relevancia para el ámbito político, constitucional y social de una nación que asiste con comprensible inquietud al discurrir de las horas. “Me resulta desconcertante ver a un profesional de la BBC ofreciendo teorías contrapuestas sobre la salud de la reina mientras la nación se conecta a las noticias”, ha asegurado.
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