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Marineros de Seattle está cerca de conseguir su boleto a la postemporada después de tantos años de ausencia, todo gracias a sus piezas importantes que han encontrado la fórmula ganadora, pero también gracias a la presencia de Luis Castillo, quien le dio una gran estabilidad al pitcheo y que con cada victoria, los acercó a donde están hoy.
El dominicano, fue adquirido menos de dos meses desde los Rojos de Cincinnati y desde entonces, se ha convertido en un verdadero ídolo en una organización que está comenzando a saborear las victorias como todo un equipo campeón. Además, Castillo también se ha involucrado al máximo en su nuevo equipo y por eso no dudó en aceptar una extensión de contrato por cinco años y $108 millones de dólares, aunque pudiera llegar a los seis años a cambio de $133 millones de dólares.
“Estoy muy, muy feliz de finalmente ser parte de una familia a largo plazo. Tengo que darlo todo. Todo mi corazón. Todo. Si nos preparamos para la Serie Mundial, salgamos y vayamos por ella”, comentó Luis Castillo en su presentación.
“Lo primero que me llamó la atención fue la personalidad del equipo. Cuando llegué, vi a la gente que estaba aquí. Muy unidos y competitivos. Ésa fue una de las primeras cosas que me convencieron”, finalizó el lanzador.
Con Seattle, el derecho tiene récord de (3-2) con 22 carreras limpias permitidas en 59 entradas y un tercio de labor y con 69 bateadores recetados para una estupenda efectividad de 3.34 en diez aperturas completadas.
De esta manera, el equipo que hace vida en la División Oeste de la Liga Americana, aseguró la presencia del que pudiera ser un “As” de la rotación en las venideras campañas; mientras que en la actual, tiene todo a su favor para comenzar el primer juego de la serie de la postemporada en caso de concretar su pase.
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