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Dino García / Impremedia
QUEENS, NY – El chico de moda del tenis, el precoz adolescente que ya es el jugador con más partidos ganados de 2022, sigue firme en su camino a convertirse en el número 1 más joven de la historia. Carlos Alcaraz, “Carlitos”, superó al bosnio Marin Cilic 6-4, 3-6, 6-4, 4-6 y 6-3 para alcanzar los cuartos de final del US Open por segundo año consecutivo.
El partido, al que le faltaron 6 minutos para las 4 horas, por momentos fue un duelo de pegadores gracias a las dos excelentes derechas de ambos. Pero Alcaraz tiene más opciones en su juego. Combina dejadas con globos. Unas veces resta la bola alta metido en la pista y otras espera al fondo. Y, sobre todo, tiene a sus 19 años unas piernas que ya no tiene –y quizá nunca tuvo– el veterano Cilic que cumple 34 años este mes y fue campeón del US Open en 2014.
Alcaraz jugará los cuartos de final el miércoles ante otro joven prodigio, el italiano de 21 años Jannik Sinner, sembrado número 11 que derrotó al bielorruso de 28 años Ilys Ivashka por 6-1, 5-7, 6-2, 4-6 y 6-3 en un partido de casi cuatro horas. Sinner ya ha ganado a Alcaraz dos veces este año.
“Eso me motiva más. Espero que a la tercera vaya la vencida”, dijo Alcaraz sobre su próximo rival.
Si Alcaraz alcanza la final del US Open y Casper Ruud no lo hace, el español se irá de Nueva York liderando el ranking mundial.
Alcaraz – Cilic, un maratón de tenis
Cilic y Alcaraz se habían encontrado antes en tres ocasiones, con victoria del murciano en las dos últimas, ambas este mismo año en pista dura.
En esta ocasión Alcaraz tardó unos minutos en entrar en el partido. Pero ya en el tercer juego devolvió el break que le había endosado Cilic.
Con 2-2, el joven español levantó al público de sus asientos con una de sus ya famosas dejadas y posterior globo por encima de los 6´ 6” de altura de Cilic. De los tres juegos al saque del bosnio –que cometió falta de pie en dos ocasiones por pisar la línea al sacar–, Alcaraz ya le había roto en dos ocasiones.
El de El Palmar también presumió sus reflejos y elasticidad con una volea en la red en que cazó una derecha cruzada de Cilic a la que parecía imposible llegar. Sólido con su saque, no tuvo problemas para llevarse el primer set.
El segundo set arrancó con imprecisiones de ambos lados. Alcaraz pareció perder la concentración por momentos, con muchos errores no forzados. Mientras, Cilic seguía con su bajo porcentaje de primeros saques (terminó con un 51% por un 72% de Alcaraz) y acumulando dobles faltas (13 al final por 4 del español), pero lograba dos breaks rápidos para situarse 3-1 arriba. Fue suficiente para llevarse el set.
El partido entró en una fase más anodina pasada la medianoche en Nueva York, con juego tras juego cayendo del lado del saque, pese a que Cilic, uno de los mejores servicios del circuito, acumulaba más dobles faltas que aces (terminó con 14 por 3 de Alcaraz). Pero con 5-4 arriba, Alcaraz encontró un hueco en forma de tres bolas de break. Desperdició las dos primeras arriesgando, pero convirtió la tercera para hacerse con el tercer parcial.
Cilic desaprovechó un 0-40 con 1-1, pero después de sufrir para mantener su saque en varias ocasiones durante el cuarto set –defendió con éxito siete bolas de break–, sí aprovechó otro 0-40 con 4-4 para romper el saque de Alcaraz y hacerse con el set, pese a que el murciano deleitaba al público con una defensa portentosa desde el fondo de la pista.
El quinto set, como no podía ser de otra manera, fue dramático desde un primer momento. Cilic tomó la delantera con un break de inicio, pero Alcaraz se repuso de inmediato y rompió el saque del bosnio dos juegos seguidos para adelantarse 3-1.
Fue suficiente para el joven prodigio, que cerró el partido con su saque y celebró sobre la pista. Primero llevándose el dedo a la cabeza, indicando lo fuerte que había sido mentalmente durante toda las noches. Después señalando el suelo, como diciendo: “Ésta es mi pista”.
Y por último enfervorizado con el público, con los que incluso se hizo un “selfie” tras sacar su celular de la bolsa de raquetas.
Récord de precocidad en el US Open
Alcaraz se convirtió en el jugador más joven en alcanzar los cuartos de final dos años seguidos desde los australianos Lew Hoad y Ken Rosewall en 1952 y 1953, aún en la era amateur.
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