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Ucrania solicitó la expulsión de Rusia de la Organización de las Naciones Unidas horas después de que Vladimir Putin dijera que estaba abierto a negociaciones con “soluciones aceptables”, para terminar con la guerra en curso.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Ucrania publicó este lunes una carta en la que pedía la salida de Rusia de la ONU, así como la revocación de su estatus de miembro permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU, debido a las dudas sobre la legitimidad de Rusia tras la caída de la Unión Soviética en diciembre de 1991 que “dejaron sin resolver la cuestión de los derechos y obligaciones internacionales de la URSS”.
La Federación Rusa asumió el puesto de miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU al pasar por alto los procedimientos definidos por la carta de la ONU, afirma Ucrania, y menciona que la carta actual no contiene las palabras “Federación Rusa”.
“La Federación Rusa nunca ha pasado por el procedimiento legal para ser admitida como miembro y, por lo tanto, ocupa ilegalmente el asiento de la URSS en el Consejo de Seguridad de la ONU”, dice la carta.
“Desde un punto de vista legal y político, solo puede haber una conclusión: Rusia usurpa el escaño de la Unión Soviética en el Consejo de Seguridad de la ONU”, agregó.
Los funcionarios también señalaron la agresión de Rusia hacia Ucrania antes de la invasión del 24 de febrero, citando “ocho años de agresión armada” que incluyeron la anexión de Crimea y finalmente llevaron al sangriento conflicto actual que se ha librado durante más de 10 meses.
Putin le dijo a la televisión estatal Rossiya 1 el día de Navidad que Kiev, no Moscú, tiene la culpa de la falta de compromiso con respecto a un alto el fuego.
“Estamos listos para negociar con todos los involucrados sobre soluciones aceptables, pero eso depende de ellos, no somos nosotros los que nos negamos a negociar, son ellos”, dijo Putin.
Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergey Lavrov, advirtió a Occidente que su participación continua en la guerra afectará negativamente a la economía mundial.
También dijo que Occidente tendrá que involucrarse en última instancia en las negociaciones “lo quiera o no”.
“Nos centraremos en aquellos que nunca nos han defraudado y con los que a veces hemos logrado compromisos muy difíciles”, dijo Lavrov, según la agencia de noticias rusa Tass. “Pero cuando se lograron, nadie engañó nunca a nadie. Con Occidente, todo es exactamente lo contrario”.
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