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DOHA, Qatar – En el mundial de las sorpresas, la campeona del mundo no falló. Con menos posesión, menos tiros a gol, menos saques de esquina botados, Francia superó 2 -1 a una Inglaterra que falló un penalti en los minutos finales.
Los franceses se jugarán con Marruecos un puesto en la gran final. La semifinal tendrá lugar en este mismo estadio Al Bayt, al norte de Doha, donde la temperatura hoy no superó los 62ºF, en el partido más “fresco” de lo que va de Mundial.
El estadio estaba lleno, pero los equipos europeos tienen las hinchadas menos numerosas del campeonato. Se notó en un ambiente mucho menos bullicioso que cuando juegan Argentina, Brasil o Marruecos, por ejemplo.
Inglaterra propuso, atacó sin descanso y fue mejor en diferentes fases del partido. Pero Francia tuvo el acierto cara a gol. Los ingleses sólo supieron marcar desde los 11 metros. Harry Kane. Y sólo una vez, porque él mismo lanzó al cielo de Qatar el penal que hubiera significado el empate.
Mucho antes, una jugada por la izquierda que arrancó Mbappé, pasó por Dembélé y Griezmann para acabar con un imponente tiro de larga distancia de Aurélien Tchouaméni puso el 1-0 en el minuto 17.
Pero los británicos no se vinieron abajo. Inglaterra buscó el empate mucho más que Francia el 2 a 0. Un penalti a Bukyo Saka revisado por el VAR fue ejecutado por Kane para igualar el marcador.
De nuevo, fue Inglaterra la que tomaba más riesgos, pero el desempate vendría de la cabeza de Olivier Giroud a centro de Griezmann en el minuto 78.
El árbitro no marcó un claro penal sobre Saka de Tchouaméni. Pero ahí estuvo el VAR de nuevo para corregir el error. El que no estuvo fue Kane, que golpeó muy por arriba del larguero.
Los ingleses aún tuvieron una más de tiro libre en el último minuto del descuento. Pero
Marruecos y Francia jugarán la semifinal el miércoles 14 en el estadio Al Bayt