Jhonathan Diego (23) fue arrestado en el estado Georgia, siendo el segundo hispano detenido como sospechoso de una balacera que dejó tres heridos y un fallecido, Gregorio Álvarez (28), durante una vigilia por la víctima de un tiroteo previo en El Bronx (NYC) en diciembre.
Diego fue detenido en la casa de su novia en Stone Mountain (Georgia) el 21 de marzo y recién llegó extraditado de regreso a NYC, acusado de homicidio involuntario, intento de asesinato y posesión de armas. Su presunto cómplice, Cristian Blanco Mejía, de 28 años, había sido arrestado por los mismos cargos el 12 de enero, recordó Daily News.
La policía los había identificado anteriormente como sospechosos del tiroteo del 28 de diciembre en las avenidas Marmion y E. Tremont, vecindario Crotona, donde cuatro personas recibieron disparos.
Álvarez recibió un impacto en el pecho y falleció en el Hospital St. Barnabas. Los otros heridos -hombres de 25, 27 y 46 años- sobrevivieron. Irónicamente las víctimas estaban en una vigilia por la muerte de Carlos González (26), quien había asesinado a tiros en un club social hondureño cercano dos días antes, según el jefe de detectives NYPD, James Essig.
Jerson Arzu, de 19 años, fue acusado más tarde de matar a González. La policía dijo que el tiroteo de la vigilia fue una venganza por esa homicidio. Arzu y Blanco Mejia quedaron detenidos sin derecho a fianza.
Los jóvenes son cada vez más protagonistas en la violencia armada de Nueva York como víctimas y victimarios, particularmente balaceras y ataques con armas blancas.
