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La Junta de Educación de Florida amplió el miércoles la legislación existente del estado “No digas gay” y la prohibición de la enseñanza de la sexualidad y la identidad de género en todas las escuelas públicas del estado.
La ley, oficialmente llamada “Derechos de los padres en la educación”, castiga a los maestros que aborden en las aulas la identidad de género y la orientación sexual, misma que está vigente desde 2022 entre el jardín de infancia y el tercer grado.
Antes de la decisión de hoy, a los maestros y distritos de las escuelas públicas se les prohibió hablar sobre la identidad de género y la sexualidad en las aulas de jardín de infantes a tercer grado de la escuela primaria.
La extensión anunciada hoy amplía la medida a los estudiantes de cuarto grado y hasta el décimo segundo, el último nivel del instituto; entonces, la prohibición cubre a las infancias desde los cinco años hasta los 18.
Bajo la nueva regla, los educadores de las escuelas públicas de Florida no pueden instruir “intencionalmente” a los estudiantes en los grados K-12 sobre orientación sexual o identidad de género, con la excepción de “a menos que dicha instrucción sea expresamente requerida por los estándares académicos estatales… o sea parte de un curso de salud reproductiva o una lección de salud para la cual los padres de un estudiante tienen la opción de que su estudiante no asista”, informó CBS Miami.
Según la ley, los padres podrán presentar demandas judiciales contra el distrito escolar y recibir una indemnización por daños y perjuicios, si se incumple esta disposición.
Los proyectos de ley de expansión originales “No digas gay” fueron propuestos en marzo por la administración republicana del gobernador Ron DeSantis, quien promulgó la ley inicial de “Derechos de los padres en la educación” en el estado hace más de un año.
“La lujuria por la censura del gobierno es insaciable”, tuiteó la organización de defensa LGBTQ+, Equality Florida. “Qué vergüenza para la Administración DeSantis por poner un objetivo en las espaldas de los floridanos LGBTQ”.
“La Campaña de Derechos Humanos condena enérgicamente esta forma de política extremista y peligrosa. Nunca dejaremos de luchar por los floridanos LGBTQ+, en particular los niños transgénero y no binarios. Ellos merecen algo mejor de sus líderes electos, y merecen vivir vidas plenas sin miedo”, dijo Kelley Robinson, presidenta de la Campaña de Derechos Humanos en un comunicado de prensa.
La legislación “No digas gay” también se opone a una pluralidad de floridanos encuestados con un estudio de 2022 del Laboratorio de Investigación de Opinión Pública de la Universidad del Norte de Florida que encontró que el 49% de los encuestados estaba en contra de la aprobación de la ley original.
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