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Fue descubierto un anzuelo de cobre para cazar tiburones en Israel, lo que suguiere que los antiguos habitantes de aquella región histórica pudieron haber tenido en su menú a los escualos.
El anzuelo que fue descubierto originalmente durante las excavaciones realizadas por la Autoridad de Antigüedades de Israel en la ciudad de Ashkelon, podría tener unos 6,000 años de antigüedad, según estiman los científicos.
Se trata de “uno de los anzuelos de cobre más antiguos jamás encontrados”, reliquia que es notable tanto por su edad como por su tamaño, según dijo en un comunicado enviado al medio especializado ILFScience, el doctor Yael Abadi-Reiss.
Gracias a este y otros descubrimientos, los historiadores ahora pueden contar la historia de cómo vivían, pescaban y comían los ocupantes de esta región histórica durante la Edad del Cobre.
“Este hallazgo único mide 2.6 pulgadas de largo y 1.6 pulgadas de ancho, sus grandes dimensiones lo hacen adecuado para cazar tiburones de 6.6 a 9.8 pies de largo o grandes atunes”, explicó.
“Anzuelos más antiguos encontrados anteriormente estaban hechos de hueso y eran mucho más pequeños que este”, agregó Abadi-Reiss.
“El uso del cobre comenzó en el período calcolítico y es fascinante descubrir que esta innovación tecnológica se aplicó en la antigüedad para la producción de anzuelos para los pescadores de la costa mediterránea”, dice Abadi-Reiss.
En el Levante, que abarca gran parte de lo que hoy se conoce como Oriente Medio, el período Calcolítico comenzó hace unos 6,500 años y duró aproximadamente un milenio.
También conocido como la Edad del Cobre, este período de la prehistoria vio el advenimiento de la metalurgia del cobre y el surgimiento de nuevas prácticas y creencias religiosas.
La región que rodea a Ashkelon ya era un centro rural próspero en ese momento, con una economía local que se basaba en actividades agrícolas tradicionales como el cultivo de trigo y el pastoreo de ganado.
Los descubrimientos previos de huesos de animales, restos de alimentos carbonizados, cerámica y herramientas de piedra han ayudado a los arqueólogos a reconstruir los estilos de vida y los hábitos dietéticos de la población calcolítica de la región.
Sin embargo, el descubrimiento de un gran anzuelo de cobre añade una nueva dimensión a la historia, lo que indica que las personas también se lanzaron a las olas en busca de consumir tiburones y otras especies de gran tamaño.
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